Rige la baja del impuesto PAIS: el Gobierno nacional espera efectos en los precios y en las importaciones
El Poder Ejecutivo ha publicado en el Boletín Oficial el decreto que establece la reducción de la alícuota del impuesto PAIS del 17,5% al 7,5% en el uso de dólares para el pago de importaciones y fletes internacionales.
Esta medida, que devuelve el tributo a niveles anteriores al cambio de gobierno en diciembre, busca influir en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y generar una mayor demanda de divisas.
El equipo económico del Gobierno espera que esta reducción impositiva contribuya a frenar la inflación, que ha mostrado una tendencia estable en los últimos meses. Según el ministro Luis Caputo, se espera que el ritmo de precios en septiembre sea más bajo que en julio, cuando alcanzó un 4%, y similar al de agosto.
Sin embargo, el mercado se muestra escéptico sobre el impacto real en los precios. Un informe de LCG sugiere que el efecto sobre la inflación será difícil de medir y probablemente no significativo, ya que dependerá de la estructura de costos de los bienes y servicios que incorporan productos importados. Por su parte, el Grupo IEB destaca que podría haber un «colchón» para evitar remarcaciones inmediatas, lo que ayudaría a reducir la inflación futura.
La reducción del impuesto PAIS también tendrá efectos en la recaudación fiscal y en la demanda de divisas. De acuerdo con LCG, el fisco dejará de percibir ingresos equivalentes al 0,4% del PBI, unos USD 2.500 millones para lo que queda de 2024. A pesar de esto, el Gobierno confía en que la medida no comprometerá el equilibrio fiscal debido a compensaciones por otras medidas fiscales.
En términos cambiarios, se espera que la baja del impuesto genere una mayor demanda de divisas para importaciones, una tendencia que ya se observaba en agosto. Según Invecq, el tipo de cambio importador caerá a niveles similares a los de antes de las PASO en agosto de 2023, lo que podría traducirse en un incremento de las compras externas y tensar el plano cambiario en el corto plazo.
El Gobierno considera que esta medida es un paso en la dirección correcta, aunque reconoce que puede generar tensiones cambiarias y una pérdida significativa de recursos para el Tesoro. Se espera que, desde septiembre, los precios de algunos bienes importados puedan bajar, aunque el impacto final es incierto.
“La baja del impuesto PAIS es una medida que busca reducir la inflación y fomentar las importaciones, aunque su impacto total aún está por verse”, concluyó un informe de LCG.
Fuente: Infobae
